Pruebas Rápidas para COVID
La prueba es fácil de realizar y puede detectar los anticuerpos IgG e IgM en 10 minutos con una precisión de 98,9% (para IgG) y 86,8% (para IgM) y no hay reactividad cruzada con los anticuerpos contra la Gripe A+B, RSV, Adenovirus, Sífilis, H. pylori, HBsAg, VIH, VHC.
La prueba rápida cuenta con certificación ISO 13485, certificación GMP de Corea, certificación CE "A", certificación CE "B", certificación CE, SELT TEST, están registrados ante la FDA, además de tener certificado de la COFEPRIS con el numero 203300401B0426
¿COMO FUNCIONA?
Las pruebas rápidas son fáciles de usar y solo requieren de una pequeña muestra de sangre a través de un pequeño pinchazo en el dedo (como las pruebas de glucosa). También se puede utilizar suero o plasma en lugar de la sangre. Se pueden usar en pacientes sintomáticos o asintomáticos ya que detecta tanto la infección temprana como tardía.
1- Obtenemos la muestra de sangre
2- Colocamos una gota de sangre
3- Agregamos dos gotas del diluyente
4- Esperamos de 10 a 15 minutos
5- Se obtiene el resultado
COMO INTERPRETAR LOS RESULTADOS
El cassette se compone de una almohadilla con oro coloidal conjugado con antígenos COVID-19. Cuando se agrega la muestra de sangre, seguida del diluyente (también llamado buffer), se forma un complejo antígeno-anticuerpo.
Este complejo mueve a través de una membrana de nitrocelulosa por acción capilar y cuando el complejo se encuentra con una banda de uno de los anticuerpos (banda IgM y/o banda IgG) el antígeno correspondiente queda atrapado formando una línea de color rojo que confirma un resultado reactivo de la prueba. La ausencia de una banda coloreada en una de las líneas de la prueba indica un resultado no reactivo.
El cassette también contiene un control interno (banda C) que debe exhibir un color rojo, de lo contrario, el resultado de la prueba es no válido.